La Educación Física en la Prehistoria

 Hola un gusto encontrarnos de nuevo, el día de hoy viajaremos hacia la prehistoria, sujétate fuerte toma papel y lápiz que vamos a comenzar.

La historia de la educación física tiene su origen en la prehistoria cuando el hombre usa su cuerpo para sobrevivir por la comida, la seguridad y, sobre todo, para sobrevivir. Esta disciplina fue parte de muchas épocas y culturas, por ejemplo, desde Grecia Clásica, Roma y Época visigoda.

En estos tiempos los seres humanos realizaban actividades físicas por supervivencia mas que todo, puesto que habían animales feroces. El humano primitivo tenía que cazar su propia comida por consecuencia se necesitaba de una buena condición física.

En el período paleolítico

Tradicionalmente, se ha considerado la sociedad paleolítica como un grupo humano dedicado a unas tareas productivas muy específicas, ligadas siempre a la conservación de la especie. Se ha considerado a los pobladores paleolíticos siempre dedicados a labores de recolección, caza, carroñero o pesca (Menéndez, Jimeno y Fernández, 1997). Cronológicamente, el paleolítico se inicia tempranamente en África, hace unos dos millones y medio de años, con la aparición del Homo habilis y el Homo erectus, dejándonos como testimonio algunos útiles como lachas o cantos trabajados.

Este primer período, o paleolítico inferior, da paso al paleolítico medio hacia el 100,000 a.C. Este período, también señalado como musteriense, coincide con la aparición del hombre de Neanderthal, que ha dejado sus huellas reflejadas en los útiles de lasca y en una mayor simbolización, plasmada en los rituales o en los enterramiento.

Neolítico

Llegando a el neolítico encontramos que los grupos de cazadores van abandonando el nomadismo y aparecen los primeros poblados al aire libre. El nuevo modo de vida, que supondrá una revolución trascendental en la vida humana, está basado en el cultivo de la tierra y la domesticación de animales. Los primeros agricultores descubren la cerámica y fabrican útiles de piedra pulimentada, aumentando los contactos con otras comunidades.

Aparecen las actividades físicas diversificadas según los sexos, en opinión de Blázquez (1992b). Como se recordará, este autor refería que los hombres se ocuparían de la ganadería, la caza y la confección de instrumentos de madera o piedra, mientras que las mujeres serían las encargadas de la confección de prendas de vestir, del hilado, la agricultura y la alfarería. Por otro lado, el análisis de los hallazgos arqueológicos de utensilios del neolítico andaluz permitía consignar otro grupo de actividades del ser humano del neolítico, como la carpintería, la edificación de viviendas, fortificaciones o cisternas, la ornamentación, el comercio y otra serie de actividades domésticas que incluirían la preparación de los alimentos, el molido del cereal y su almacenamiento. Desde el punto de vista de las conductas motrices, podemos diferenciar estas actividades físicas en dos grupos. Por un lado, aquellas que se incluirían dentro de la coordinación motora gruesa o coordinación dinámica general, como las implícitas en la caza, la ganadería, la agricultura, la construcción, la carpintería o la recolección. En segundo lugar, consideraremos las actividades que pueden incluirse dentro de la motricidad fina, actividades que requieren un menor concurso de las cualidades físicas como la velocidad y resistencia.

Edad de los metales

Es el momento en que el hombre comienza a utilizar diferentes tipos de metales para construir y fabricar elementos y herramientas que se volverán claves en su evolución, como por ejemplo herramientas de agricultura, armas para la caza y la guerra, y utensilios para comer.